He probado el Maybelline New York SuperStay Matte Ink en el tono 65 Seductress y puedo decir que se ha convertido en uno de mis imprescindibles. Su acabado mate es impecable, con un color rosa nude que realza los labios de forma elegante y favorecedora sin resultar excesivo. Me sorprendió especialmente su textura: se aplica con facilidad, no parchea y, una vez seca, queda completamente uniforme. Además, el aplicador en forma de flecha permite un delineado preciso, algo que valoro mucho en un labial de larga duración.
En cuanto a su resistencia, cumple exactamente lo que promete. Lo he llevado durante jornadas completas, incluyendo comidas y reuniones, y el color se mantiene intacto sin necesidad de retoques constantes. No reseca los labios más de lo habitual en un mate líquido, y con una buena hidratación previa el resultado es excelente. Por todo esto, lo recomiendo sin dudar a quienes buscan un labial duradero, elegante y versátil, perfecto tanto para el día a día como para ocasiones especiales.
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